El futuro

Nadie sabe cómo es, lo que tenemos bien claro es que los coches no volarán y no habrá robots que hagan el trabajo por nosotros. Pero sí podemos imaginarlo, eso y respirar, hoy por hoy, es gratis. Y yo me lo imagino a cámara rápida, un mundo estresado por las prisas. Sin tiempo para dar los buenos días ni las gracias. Sin embargo, será un mundo más fácil. Toda esa gente que gana tanto dinero y pone la salud humana al límite, lo hace con un objetivo claro: hacernos la vida más fácil. No tendremos que preocuparnos por hacer la compra ni cocinar porque ya no habrá alimentos (se acabaron esos deliciosos chuletones para los carnívoros y esas sabrosas salsas de soja para los vegetarianos), tendremos unas píldoras insípidas que nos aportarán la energía y proteínas necesarias para pasar el día. En un principio, pensé que para dormir tendríamos unas cabinas que crean una atmósfera de sueño perfecta durante las ocho horas necesarias y así limitar el tiempo de vigilia, pero no, tendremos otra pastilla que anule el estímulo de cansancio en nuestro cerebro, de manera que no necesitaremos dormir y podremos trabajar las 24 horas del día para pagar la hipoteca, porque al paso que vamos, me parece que vamos a tener que trabajar todo el puto año. Eso sí, siempre tendremos tiempo de ver el Madrid-Barça, aunque sea en el bar porque no tenemos Gol TV en casa.

Hoy en el blog:
Jorge Lorenzo, Buried, las declaraciones de Abidal, el Transrapid, Alberto Vázquez Figueroa, Patri nos trae la música de Sleigh Bells, y recordamos Barrio y a los Manic Street Preachers, con su nuevo disco.