Os la devolveremos en Navidad

Un día, unos amigos me invitaron a cenar. Bueno, tampoco eran unos amigos, amigos. Creo que deberíamos tener más palabras para explicar el grado de amistad que mantenemos con según qué amigos. Estos amigos que me invitaron a cenar eran simpáticos, se preocuparon por que durante la velada me sintiera cómodo y no me faltara bebida en la copa; como si quisieran pedirme un favor. A decir verdad, me trataron mejor que otros amigos que considero "mejores", que, como ya te conocen de hace tiempo y tienen confianza contigo, no preparan nada especial cuando los visito para cenar, ni se molestan en rellenarme la copa, tengo que ir yo mismo a la nevera a por más. Sin embargo, con estos amigos puedo desperezarme en la mesa y hablar sin miedo a que piensen si soy de derechas o de izquierdas, con los que un chiste racista queda en eso, una mera broma que no trasciende, o con los que puedes repetir si te has quedado con hambre. Cuando acaba una cena con amigos, si has sido invitado, es inevitable pensar que algún día, seguramente próximo, tendrás que invitarlos tú también y tendrás que estar a la altura. Después de despedirme, justo antes de salir de su casa, mi amigo me alcanzó una bolsa de basura negra con asas naranjas. "Toma, ya que vas para abajo..."Es curioso esto de llevarse la mierda de los otros a tu casa. Yo le expliqué que en mi casa hacemos turrones y no nos interesa su mierda, pero que no se preocupara, porque las próximas Navidades le iba a traer una tableta de turrón del duro relleno de toda su mierda que me han querido colar.

http://www.laverdad.es/alicante/v/20110112/provincia/castellon-confirma-traslada-toneladas-20110112.html