Los Schleck no atacan en los Pirineos y lo acaban pagando en la crono del sábado. Thomas Voeckler se pasa diez días de amarillo y no suelta el liderato hasta Alpe d'Huez. Mark Cavendish llega fuera de control, pero la organización no lo expulsa y acaba manteniendo el maillot verde. A Contador lo obliga su sponsor a participar en un Tour que le queda grande después de la paliza que se pega en el Giro y las piernas y las caídas no le dejan subir al podio. Un Tour, en pocas palabras, raro, pero que nos dejó una etapa entre Pinerolo y Galibier que tardaremos mucho en olvidar. http://bit.ly/pYBb2N
Anders Behring Breivik, un señor noruego con muchas ideas en la cabeza pero, al parecer, algo desordenadas, afirma que el problema de su país (problema que solo él ve, ya que todos consideramos a Noruega como un país aventajado) no existe entre socialistas y capitalistas, sino entre patriotas e internacionalistas y decide explicarlo mediante un coche bomba en el centro de Oslo y un tiroteo en la isla de Utøya, donde mata a casi cien jóvenes afiliados al Partido Laborista noruego (si habéis visto las imágenes os habréis dado cuenta de que noruegos, noruegos, rubios de ojos azules como Thor Hushovd o Boasson Hagen, no sale ninguno). Después de algo así, la gente normalmente se suicida, pero él no, lo que parece más raro aún. http://bit.ly/qMkoG1http://bit.ly/q9Zlnu
Vetusta Morla: Días raros http://www.youtube.com/watch?v=vlPmT_G4ZNI

No hay comentarios:
Publicar un comentario